El lugar elegido esta vez para el proyecto Conecta con la tierra fue El Castillo de Loarre. De camino, nada más pasar Huesca seguimos dirección Pamplona, pasando por Bolea hasta el pueblo de Loarre. Allí realizamos una pequeña parada, aprovechando para comprar pan y unas pastas en el obrador del pueblo, y también tomar un té bien caliente en la terraza de un bar.
El sol fulgurante deslumbraba con su intensa luz, y el cielo se mostraba azul clarísimo, hacía un día magnífico. Tras el tentempié subimos en coche hasta el castillo situado unos 4km más arriba del pueblo. Al acercarnos se podía observar la sobria y majestuosa fortaleza erigirse sobre los peñascos que cortan la falda de la montaña donde está enclavada. Al fondo, detrás del castillo, se extiende un bosque de altos pinos, con sinuosas sendas, conformando el conjunto un pintoresco paisaje digno de cualquier historia épica medieval.
Marta es una de los guías que enseñan el castillo mediante una propuesta amena y didáctica a la vez. Expuso cómo era la vida de los residentes del castillo a lo largo de sus diez siglos de historia: reyes, caballeros, monjes, prisioneros… y las actividades que realizaban en las distintas dependencias de la construcción: torres de vigilancia, capilla, patio de armas, dormitorio, comedor, sala capitular, etc. ¡Ah!, por cierto, en la zona donde los caballeros se entrenaban para la batalla, recitamos un bello poema que presenta una visión literaria acerca del castillo y su historia. Lo podéis encontrar en el siguiente enlace:
http://www.laalcazaba.org/castillo-de-loarre-huesca/
Al terminar la visita, comimos en una zona habilitada en el exterior de la oficina de información, donde se adquieren las entradas, y posteriormente nos adentramos en el bosque ascendiendo la montaña. Paramos en un lugar donde las vistas eran espectaculares, se divisaba la Hoya de Huesca por completo con sus pueblos, campos de cultivo, estanques... Y las montañas que la encierran, circundándola. Este maravilloso paisaje junto con la claridad singular del cielo intensamente azul, impregnaron ese momento de paz y armonía…
